
La narración oral es una siembra, un aprendizaje quizá lento y sin duda continuo. Pablo Albo lleva muchos años de siembra y de cosecha oral, pero si 2008 fue un año de premios, parece que 2009 está siendo para él un año especialmente cargado de libros, en troncos muy diversos y con la compañía o el canto de ilustradores asimismo diversos. A falta de Diógenes, y solo en estos meses de 2009:
- La sopa quema, ilustrado por André Letria, OQO
- Melena, ilustrado por Riki Blanco, Factoría K
- Inés Azul, ilustrado por Pablo Auladell, Thule
- Marabajo, ilustrado por Jesús Aguado, Anaya
- El último canto, ilustrado por Miguel Ángel Díez, OQO
- 37 tortugas, ilustrado por Inés Vilpi, Mil y un cuentos